Caviahue, blanca virginidad

Por; Verónica Malamfant / corresponsal
Sur de Argentina.- Bajo la cruz del sur se extienden nieves eternas que coronan los picos más altos de la cordillera argentino-chilena. Justo allí la nada se hace visible al ojo humano, la belleza y el frío, junto a un viento polar, corrigen la idea de absoluta inmensidad. Llegar al paraíso es difícil, pero no imposible. Bastan dos horas de vuelo desde Buenos Aires, más unos 357 kilómetros por ruta desde la ciudad de Neuquén, para llegar al Lago Caviahue.

Caviahue es un pequeño pueblo habitado por gente amable, que recibe gustoso a todo viajero. La ciudad es típica de los pueblos del sur: sencilla pero sin faltar detalle. Resalta su entorno natural, dominado por los increíbles bosques de araucarias de más de dos mil años que coronan la fachada de la villa.

La peculiar y exótica ciudad está hermosamente decorada por el volcán Copahue a cuya cima, situada a 2 mil 960 metros sobre el nivel del mar, se puede llegar a través de una oruga gigante o un snowtrack.
En las faldas del Copahue el contraste es evidente, sus aguas termales, albercas de algas y barro terapéuticos que en verano -de diciembre a marzo- son verdaderas fuentes de salud.
Caviahue es uno sitio ideal para los turistas que buscan lugares vírgenes con entornos naturales únicos. Incluso para aquellos viajeros que se interesan por sitios de nieve poco inexplorados. El año pasado, como todos los años, Caviahue fue seleccionado para formar parte de la competencia internacional, El desafío de los volcanes.
http://www.revistafortuna.com.mx/opciones/archivo/2004/agosto/html/turismo/caviahue.htm